Los integrantes del Grupo Parlamentario del Partido Revolucionario Institucional, con fundamento en los artículos 58 y 59 del Reglamento para el Gobierno Interior del Congreso General, somete a la consideración de esta honorable asamblea la siguiente proposición con punto de acuerdo, con carácter de urgente y obvia resolución, con base en las siguientes:
Consideraciones
1. La actual administración se ha caracterizado por enmarcarse en el mayor crecimiento de la violencia. Hasta ahora, según contabiliza un periódico de circulación nacional(1), la cifra de ajusticiados sumarían 16 mil 205. A la pregunta, ¿Qué balance ofrecen las políticas contra el narcotráfico? La respuesta es que, después de tres años una verdadera guerra, que ha militarizado gran parte del territorio nacional, los resultados han sido limitados: las hectáreas de cultivo no se han reducido, se ha dañado de manera importante a la población civil, se han multiplicado los enclaves y redes delictivas y ha aumentado el consumo de sustancias adictivas de todo género.
2. Las políticas del gobierno se centran principalmente en el aspecto punitivo, pero nos parece que la prevención es inconsistente, insuficiente, ineficaz y prácticamente inexistente, lo que constituye un error, ante un fenómeno complejo, que se origina en el consumo. En palabras del propio secretario de Seguridad Pública, durante su pasada comparecencia, la violencia que padecemos obedece al crecimiento del consumo de droga. Es contradictorio que en este tema, el del consumo, mientras el Consejo Nacional Contra las Adicciones reconoce que en 2008 sólo había 361 mil adictos, los datos entregados a esta Soberanía por la Secretaría de Seguridad Pública, sitúen en un millón 700 mil los mexicanos que consumen diariamente cocaína y en 3 millones los que son consumidores de mariguana, lo que representa, además de un serio problema de salud pública, un importante mercado cuyo valor anual se calcula en 811 millones de dólares, según estima el propio gobierno.
3. Nos parece una seria contradicción que en 2009, el Gobierno Federal gastó en publicidad 1,875.8 millones de pesos, mientras que para la prevención y atención de las adicciones hayan sido solo 500 millones, incluidos las aportaciones al sector social y privado, así como a las entidades federativas, como lo establece el PEF. Este virus ha producido, hasta este mes, presumiblemente 1011 decesos, reconocidos por la evaluación de febrero de la Secretaría de salud, en tanto que las muertes por el crimen organizado fueron en 2009 más de 7 mil y en 2010 van más de mil. ¿Qué representa que mientras a la seguridad pública se asignen en el Presupuesto para 2010 más de 60 mil millones, en este mismo año el gasto contra las adicciones sea de solo 896 millones de pesos? Así, ¿hay seriedad en el importantísimo tema de las adicciones y su prevención?
4. En marzo del año 2007, se realizó un importante decomiso de dinero en efectivo, que según la PGR fue de cerca de 207 millones de dólares, procedentes del tráfico de efedrina realizado a nuestro país por Zhenli Ye Gon. No obstante las propuestas del Ejecutivo sobre su uso en la creación, ampliación y fortalecimiento de las clínicas especializadas en el tratamiento de las adicciones, hasta el día de hoy ¿Cuántas clínicas se han instalado? ¿Qué resultados han tenido? ¿Quién es el responsable, cómo se evalúan? La realidad es que se desconoce el destino de dichos recursos económicos.
5. La evolución del fenómeno de consumo de drogas en nuestro país reviste una gravedad que nos azora. Según cifras de la Encuesta Nacional de Adicciones 2008, el consumo de drogas ilegales en la población entre 12 y 65 años aumentó de 4.6% en 2002 a 5.2% en 2008.
De 2002 a 2008, periodo comprendido entre las administraciones de Vicente Fox y Felipe Calderón, el índice de crecimiento en el consumo de mariguana y cocaína pasó del 3.5 al 4.2% y del 1.2 al 2.4%, respectivamente.
El consumo de crack y metanfetaminas aumentó seis veces. La edad de inicio del consumo de estimulantes tipo anfetamínicos concentra en menores de 25 años el 88.7% y el consumo de anfetaminas o estimulantes el 63%.
Destaca que la proporción de personas que progresaron del uso al abuso y a la dependencia se incrementó en más del 300 % respecto de cuatro generaciones anteriores; el porcentaje en la generación nacida entre 1984-1996, que son los jóvenes de entre 14 y 26 años, es de 27.8%. Este es un fenómeno alarmante de salud pública.
6. Por todas estas consideraciones, afirmamos contundentemente que en materia preventiva, la actuación del gobierno es marginal y unilateral. El Consejo Nacional contra las Adicciones, que depende de la Secretaría de Salud, es débil y sin capacidad de acción y convocatoria.
7. Tenemos que aprovechar el potencial de la sociedad civil, que, en el tema del tratamiento y prevención de adicciones cuenta con muchas organizaciones y experiencia, pero que trabaja sin el apoyo firme del Estado. La prevención debe prever mayores recursos y estímulos fiscales para quienes dedican su vocación altruista a proteger a nuestros jóvenes de los daños a su salud por este fenómeno.
Por ello nuestra propuesta consiste en integrar un Grupo de Trabajo Interinstitucional de alto nivel en materia de prevención y tratamiento de las adicciones que genere, de inmediato, un verdadero programa nacional contra las adicciones, que involucre a los poderes Ejecutivo y Legislativo, a los tres niveles de gobierno y a la sociedad. Así, la propuesta de una política de Estado pasará del discurso a la acción positiva para beneficio de la Nación.
Por lo anteriormente expuesto, propongo a esta honorable asamblea, la presente proposición, con carácter de urgente y obvia resolución, con los siguientes:
Puntos de Acuerdo
Primero. Se cita a los titulares de las Secretarías de Educación Pública, Salud, Seguridad Pública, Gobernación, Hacienda y Crédito Público, la Procuraduría General de la República, el Sistema de Administración Tributaria y del Consejo Nacional contra las Adicciones, para realizar la integración de un Grupo de Trabajo Interinstitucional entre los Poderes Ejecutivo y Legislativo, a fin de impulsar la elaboración de un nuevo y eficaz programa nacional contra las adicciones, que comprometa a todas las instituciones y niveles de gobierno.
Segundo. En dicho Grupo de Trabajo de alto nivel, participarán dos legisladores integrantes de cada una de las comisiones cuya atribución corresponda con las dependencias convocadas, bajo los criterios de respeto a la pluralidad y a la representatividad de los Grupos Parlamentarios.
Tercero. Este Grupo de Trabajo tendrá entre sus atribuciones y en el marco de sus respectivas competencias legales y jurisdicciones, el impulso a la elaboración de un nuevo y eficaz Programa Nacional para la Atención y Prevención Integral de las Adicciones. Dicho Programa considerará acciones en los rubros de educación, salud, comunicación, participación social, justicia, seguridad pública, una estrategia de financiamiento y la creación de estímulos fiscales a la acción de la sociedad civil, además de las adecuaciones administrativas que se consideren necesarias. En lo relativo al Poder Legislativo, se analizarán las reformas legales que se estimen convenientes para fortalecer la lucha contra las adicciones.
Cuarto. El Grupo de Trabajo deberá quedar constituido a más tardar el día 23 de febrero del presente año.
Quinto. El Programa acordado deberá contar con instrumentos de verificación de resultados a corto, mediano y largo plazos, consistentes, entre otros, en indicadores de resultados y calendario de acciones, compromisos y responsables.
Palacio Legislativo de San Lázaro, a 16 de febrero de 2010.
Nota:
1 Periódico El Universal, 1 de enero de 2010.