El presidente diputado Marco Antonio Adame Castillo: Tiene la palabra el diputado Héctor Serrano Cortes.

El diputado Héctor Serrano Cortes: Con su venia, señor presidente.

El presidente diputado Marco Antonio Adame Castillo: Adelante, diputado.

El diputado Héctor Serrano Cortes: Nuestras Fuerzas Armadas son, sin duda, uno de los pilares que conforman el Estado mexicano. Es por ello que estas deben ser reconocidas en todo momento por su importancia y, sin duda, corresponder a la lealtad que han acreditado en cada etapa de la historia de nuestro México.

Hombres y mujeres con un alto sentido de vocación forman la fuerza con la que hoy cuenta nuestra nación para hacer frente a cualquier acto que ponga en riesgo la estabilidad de nuestra soberanía nacional.

Está claro que el Ejército mexicano no solo actúa de forma profesional y valiente para hacer frente al flagelo de la inseguridad, también lo hacen a la hora de asistir a la población ante cualquier caso de desastres.

Es decir, para ser integrante del Ejército Mexicano se requiere de valor, de vocación de servicio y, sobre todo, de sensibilidad humana par anteponer su integridad física o incluso su vida, por la de cualquier otro compatriota. Esta dedicación y servicio al pueblo de México no puede ni debe pasar inadvertida. El servicio que prestan a la nación los integrantes de las Fuerzas Armadas, debe de ser reconocido de forma tangible, buscando su bienestar y el de sus familias.

Es de todos sabido lo difícil que es ascender por la ruta de escalafón a la posición castrense más relevante. Las condiciones de vida de ellos y sus seres queridos, hoy nos corresponde atender. Lo que busca esta propuesta legislativa, es permitir mayor accesibilidad para que miles de integrantes de nuestras Fuerzas Armadas mejoren su condición de vida, no como un acto de generosidad, simple y llanamente lo debemos hacer como un acto de justicia.

Si bien esta disposición tiene como finalidad garantizar que los aspirantes a ser atendidos a un grado superior, cumplan con un perfil de experiencia profesional, lo cierto es que existen casos que al atender alguna orden o comisión de servicio no tienen la posibilidad de observar el requisito correspondiente al tiempo de servicio que se requiere en el grado para aspirar a otro de mayor jerarquía.

Así que esta obligación de cumplir con un mínimo de tiempo de servicio, resulta verdaderamente discriminatoria e injusta, y los excluye de esa posibilidad por el simple hecho de que no está en su potestad decidir la comisión de una comisión o encargo. Por ello, esta orden superior no puede ni debe ser un limitante para concursar y lograr un ascenso.

En este orden de ideas el propósito del proyecto de decreto contenido en el dictamen que hoy pone a nuestra consideración la Comisión de Defensa es eliminar la restricción relativa al tiempo mínimo de servicio para poder acceder a una promoción, con lo cual se privilegia el mérito, la eficacia y la eficiencia, y no así la antigüedad.

Por otra parte, esta obligación también busca eliminar aquellas obligaciones que resuelvan actos discriminatorios y que a veces dificultan, sin duda, el acceso de los elementos militares.

Compañeras y compañeros diputados, votar a favor de esta propuesta legislativa nos permite aproximarnos a un acto de justicia, del cual sin duda son merecedores los integrantes de las Fuerzas Armadas de México. Por supuesto estamos a favor de esta propuesta. Muchas gracias.